La Crisocola es una piedra de color semejante a la Turquesa. Trabaja las heridas profundas en relación a la feminidad. Energéticamente equilibra la energía de abuso que ha recibido la mujer por milenios, causada por el patriarcado. Trabajar con esta piedra color celeste ayuda a sacar a la Diosa que tenemos guardada, es fluir con la divinidad femenina que está lista para expresarse y crear en la Tierra. Maravillosa tanto para mujeres como para hombres.
Según Katrina Raphaell las aplicaciones prácticas más comunes son regular las hormonas que regulan el ciclo menstrual. También es usada después de abortos voluntarios o voluntarios para ayudar en el proceso de limpiar las emociones de culpa, miedo. En este caso se ubican las Crisocolas sobre el vientre y la frente.
Este producto contiene 1 piedra.